lunes, 18 de julio de 2011

Esterilización Masculina.

Hay un momento (o varios) en la vida de pareja en la que surge la pregunta ¿queremos tener más hijos?, en otros casos la pregunta puede ser ¿queremos tener hijos?, cuando la respuesta a estas pregunta es un “sí”, lo ideal es que de manera informada la pareja decida que método desean utilizar hasta el momento del próximo embarazo. Si la respuestas es un “no se”, lo recomendable es no tomar médidas que alteren la fertilidad de manera permanente, es decir, que no se esterilicen hasta no estar convencidos de que la decisión será para siempre. Ahora bien, cuando la respuesta es un “no”, esta muy claro lo que hay que hacer, esterilizarse, “cerrar la fábrica, y abrír el parque de diversiones” como escuche algúna vez. Pero esta última opción, de ser la elegida, ¿sólo debe pensarse en la mujer?, ¿que pasa con el hombre?. Nuestra mujer va al ginecólogo, es quien en la mayoría de las parejas hace uso de algún método anticonceptivo, generalmente de mediano y largo plazo. Nuestra mujer es quién se embaraza y tiene partos, es a quién le llega la regla una véz al mes, es quién más gasta en médicos, convengamos en que no la tienen fácil.

Los hombres deberían sentarse un par de segundos y valorar el rol de la mujer en la vida sexual y reproductiva de la pareja. Cuando lo hagan, además de convencerse de que eso del “sexo débil” es un gran mentira, probablemente considerarán participar de manera más activa en esto de lo que estamos hablando, y recién ahí podremos escuchar frases como “perfecto, no queremos tener más hijos, pero quién se esteriliza ¿tu, o yo?”. De esto les escribiré hoy, de la esterilización masculina, la vasectomía.

En lo personal, es mi opción, hace tiempo se lo dije a mi pareja. Los motivos son muy claros, y los enumero a continuación.
• Primero, es una técnica simple y sin grandes riesgos, a diferencia de una esterilización femenina, que es una cirugía que requiere someterse a anestesias generales, raquídeas ó peridurales, y por consiguiente a todos los riesgos que eso conlleva, además en el post-operatoria tienen mayor riesgo de presentar complicaciones en comparación con la vasectomía. Entonces la primera pregunta que se debería hacer un hombre es “¿Es necesario exponer a mi pareja a eso, si yo también puedo hacerlo y sin exponerme a tantos riesgos?.
• Segundo, es más efectiva que la femenina. Mientras la esterilización femenina presenta una tasa de embarazo del 0,2 al 0,4%, la vasectomía sólo presenta un riesgo del 0,02 al 0,2%.
• Tercero, me basta con las dos anteriores.

A estas alturas del relato sólo me basta explicar en que consiste la vasectomía. Este procedimiento consiste en cortar los conductos deferentes que son quienes transportan los espermatozoides hasta el semen. Por lo tanto hay semen, pero no espermatozoides. Como dijo un amigo “Es como una pistola de juguete, disparas, pero no matas”. Otra cosa que es importante señalar es que no ejerce ninguna modificación hormonal en el hombre, así que seguimos siendo igual que antes, nada de dudar en la virilidad.

De acuerdo a un decreto del año 2000, el Estado de Chile garantiza el acceso a la esterilización masculina y femenina, en igualdad de condiciones. Siendo una decisión persona, independiente de la edad, numero de hijos, condición socioeconómica o cualquier otra condición presente.

Señores no nos hagamos más los lesos, seamos co-responsables en la vida sexual y reproductiva de la pareja, los tiempos ya no están como para ser un mero espectador. Si usted es mujer y esta leyendo esto, muéstreselo a su pareja, al menos generará la discusión, por algo se empieza.

No hay comentarios: